El ministro de Asuntos Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, ve una creciente disposición a alcanzar un compromiso que pueda poner fin a la guerra civil en Siria que permite hablar de un "punto de inflexión" en el conflicto.
En una entrevista que publica el dominical "Bild am Sonntag", el ministro señaló que "el régimen del (presidente sirio Bachar al) Asad está debilitado militarmente. El avance del EI (Estado Islámico) ejerce presión también sobre los países vecinos. Por eso crece también la disposición a alcanzar compromisos".
Además, el acuerdo nuclear alcanzado en Viena entre Irán y las potencias del Grupo 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) "impulsa la diplomacia regional", agregó.
Por otra parte, los jefes de la diplomacia estadounidense y rusa se han reunido con los Estados del Golfo para abordar la situación en Siria, recordó Steinmeier, quien precisó que aunque todavía no se pueda hablar de un "avance", sí que se trata del "punto de partida" que todos esperaban hace tiempo, dijo.
Según estimaciones de la ONU, la guerra civil que azota Siria desde 2011 se ha cobrado la vida de más de 250.000 personas.
El ministro se refirió también a la situación en Libia, donde dijo que después de años de amargos enfrentamientos "existe ahora la posibilidad de un gobierno de unidad nacional".
"Si se lograra, volvería a haber una autoridad estatal y entonces gran parte de Libia dejarían de vivir bajo la influencia del crimen organizado y las organizaciones dedicadas al tráfico de inmigrantes", señaló.
En este sentido, Steinmeier se refirió a la oleada de refugiados que llegan diariamente a Europa y subrayó la necesidad de cuotas de reparto entre los estados miembros de la Unión Europea.
"Pero lo más importante es crear incentivos para que las personas se queden en sus países y no se vean obligadas a huir", indicó.
Según el ministro, "Europa debe comprometerse más, no sólo económicamente, con los principales países de origen de los refugiados".
