La Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden, anunció este viernes más sanciones hacia el Gobierno de Cuba, esta vez a la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y a dos de sus líderes, tras las protestas del pasado 11 de julio, pero aparcó las acciones sobre el internet y el envío de remesas a la isla.
El Departamento del Tesoro de EE.UU. sancionó al director de la PNR, Óscar Callejas Valcarce, y su subdirector, Eddy Sierra Arias, por su presunto papel en la represión de las inéditas manifestaciones antigubernamentales en el país caribeño.
Las sanciones bloquean cualquier activo que Callejas, Sierra o los integrantes de la PNR puedan tener bajo jurisdicción estadounidense, y prohíbe a quienes estén en Estados Unidos negociar con ellos, sobre la base de la ley estadounidense Magnitsky.
La de este viernes fue la segunda ronda de sanciones que ha impuesto el Gobierno de Biden, después de que el pasado jueves el Tesoro anunció medidas contra el ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de Cuba, Álvaro López-Miera, y una unidad militar de élite conocida popularmente como "avispas negras" o "boinas negras".
"Estamos haciendo que el régimen rinda cuentas", dijo horas después Biden, quien este viernes recibió en la Casa Blanca a un grupo de estadounidenses con raíces cubanas.
Además, prometió más sanciones "a menos que haya un cambio drástico en Cuba", y anticipó entre los destinatarios a "las personas que llevan a cabo los abusos del régimen".
INTERNET Y REMESAS
Y pese a que en el encuentro se esperaban medidas sobre el acceso a internet en la isla y posiblemente sobre el envío de remesas a Cuba, Biden apuntó que trabajan en ello.
Al referirse al internet, el gobernante demócrata aseguró que están buscando "todas las opciones disponibles" para garantizar el acceso pleno de los cubanos a ese servicio, y permitir que el pueblo pueda "eludir la censura".
"Siempre se sabe que algo no va bien cuando un país no permite que su pueblo esté en internet y pueda dar a conocer su caso en todo el mundo", subrayó Biden.
Reiteró que solicitó al Tesoro que, en el plazo de un mes, le den recomendaciones sobre "cómo maximizar el flujo de remesas al pueblo cubano, sin que los militares se lleven una parte".
En noviembre pasado, bajo el Gobierno del ahora expresidente Donald Trump (2017-2021), Washington prohibió el envío de remesas a Cuba, una decisión que Biden ha mantenido en vigor y ha supuesto más presión económica para la isla.
Un funcionario estadounidense señaló este viernes a periodistas que la Casa Blanca quiere asegurarse primero de que el Gobierno de La Habana no se queda con una parte del dinero, algo complicado de garantizar.
Biden indicó igualmente que están "trabajando" en aumentar el personal en la embajada en Cuba, que fue reducido después de que, en 2017, casi una treintena de diplomáticos estadounidenses sufriera unos misteriosos "incidentes de salud" cuyos motivos aún no han sido aclarados.
A la reunión de este viernes con Biden asistieron el cantante cubano Yotuel Romero, cuyo tema "Patria y vida" se convirtió en la "banda sonora" de las protestas populares en Cuba; además del senador demócrata Bob Menéndez y el congresista del mismo partido Gregory Meeks.
También acudieron Manny Díaz, exalcalde de Miami (2001-2009); Felice Gorordo, empresario cubano-estadounidense y consejero delegado de eMerge Américas; y Ana Sofía Peláez, cofundadora de la organización "Miami Freedom Project".
Menéndez, quien preside el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, destacó en un comunicado que los líderes cubano-estadounidenses "tuvieron la oportunidad de entablar una conversación directa con el presidente (Biden) sobre lo que se debe hacer para que el régimen cubano rinda cuentas por la brutalidad que ha perpetrado contra su propio pueblo".