Los lenguajes fueron bien distintos. La temática la misma: inmigración y comunicación. El Colegio de Periodistas de Andalucía ponía en marcha unas jornadas de la mano de la Fundación Unicaja para abordar la comunicación y la inmigración.
La apertura corría a cargo de las instituciones. La presidenta de la Diputación, Irene García, y el delegado territorial de la Junta en Cádiz, Juan Luis Belizón, hablaban de unidad, compromiso y “acción”, señalaba García, para lo que se necesitan “decálogos para conocer dónde estamos y qué hacemos”.
Por su parte, Belizón habló de generar empatía con el migrante y demandó la celebración de la Conferencia Sectorial de Inmigración para que todas las comunidades autónomas asuman su cuota de solidaridad. Bajo la potestad de la Junta están los centros de MENAs (Menores Extranjeros No Acompañados). En las últimas jornadas se han visto desbordados por la llegada de embarcaciones procedentes del otro lado del Estrecho, lo que ha provocado que se tenga que atender a 180 menores de más de la capacidad con la que cuentan dichos centros. Según Belizón se está “habilitando el procedimiento administrativo para incrementar el número de plazas”.
Mientras tanto, desde Unicaja, Javier Vela, abogaba por la “responsabilidad institucional; por ser la mirada y el oído ante la problemática que nos afecta a todos y convertirnos en el granito de arena”.
La segunda de las mesas traía a María José Martínez, de Acnur, al jefe del Centro de Salvamento Marítimo en Tariga, Adolfo Serrano, al portavoz del CNP, Andrés Bragado, y el alferez de la Guardia Civil en Tarifa, Miguel Morote. Desde Acnur se ofrecieron cifras, además de explicar su labor en la costa gaditana, y en el resto del mapa mundi. En su intervención explicó que “este año, por primera vez, España ocupa elprimer puesto como receptora de estas personas, pasando de 4.400 en 2015 a 27.000 en 2017. Como objetivo se marca “sensibilizar para lograr la identificación en un primer momento de quienes llegan a nuestras costas y derivarlos a los procedimientos administrativos”.
También se puso sobre la mesa por Salvamento Marítimo que “si no fuera porque son rescatados no podrían llegar a la costa gaditana”. Pero son las ONGs y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, acompañados por la propia sociedad civil, quienes atienden a esos niños llorando nada más llegar a tierra. Bragado abordó la necesidad de una mayor coordinación en la recepción de estas personas tanto desde la Policía Nacional como desde la Guardia Civil y las distintas organizaciones internacionales especializadas en perfiles para que estas personas puedan ser derivadas. Se necesitan más medios económicos para crear espacios para que puedan ser recepcionados.
Los periodistas Juan José Tellez, Sara Cantos, Lucía Benítez, María Almagro y Raquel Montenegro ahondaron en su experiencia desde la investigación, el peso de la imagen frente a las palabras, la normalidad que se le da a la llegada de migrantes a nuestras costas excepto cuando la ‘lupa mediática’ se hace eco de casos como el ‘Aquarius’, cómo “lo que podría ser considerado como una oportunidad lo convertimos en problema” o luchar por una “información inclusiva, con distintos puntos de vista”.