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Provincia de Granada

Condenado a 11 años de cárcel por disparar a una familia y causar un aborto a una joven embarazada

El tribunal le atribuye dos delitos de homicidio en grado de tentativa, uno de ellos en concurso ideal con aborto, y una falta de lesiones, y le impone además el pago de una multa de 1.200 euros y de indemnizaciones a sus víctimas de un total de 12.500 euros más otros 50.000 por el aborto sufrido

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La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada ha condenado a once años de prisión a un hombre que disparó contra tres personas de una misma familia en plena calle en Moraleda de Zafayona, una de ellas una joven de 22 años en avanzado estado de gestación que, a consecuencia de los impactos de bala, sufrió un aborto. 

   El tribunal le atribuye dos delitos de homicidio en grado de tentativa, uno de ellos en concurso ideal con aborto, y una falta de lesiones, y le impone además el pago de una multa de 1.200 euros y de indemnizaciones a sus víctimas de un total de 12.500 euros más otros 50.000 por el aborto sufrido a la embarazada, según consta en la resolución, a la que ha tenido acceso Europa Press.

   La sentencia, que se produce después de que el acusado aceptara la posición de la Fiscalía tras modificar su solicitud de condena, de 24 a 11 años de cárcel, considera probado que sobre las 8,15 horas del 23 de julio de 2009, A.H.F., de 62 años, su esposa, C.J.H., de 58, y la hija de ambos, M.L.H.J., de 22, se dirigían al centro de la localidad granadina de Moraleda de Zafayona para acudir al médico.

   Tras subir las escaleras de acceso a la calle Cruz, en Moraleda, se encontraron con el acusado, identificado con las iniciales A.S.B., y que entonces tenía 49 años, quien les esperaba con una pistola para la que no tenía licencia. Efectuó contra ellos hasta nueve disparos, tras lo cual huyó manifestando "ya os lo dije ayer, iros de aquí o vamos a terminar mal".

   Como consecuencia, el hombre sufrió heridas de bala en el abdomen, que le perforaron el intestino delgado, y en pierna derecha, en glúteo, y antebrazo, mientras que su hija tuvo como consecuencia lesiones en hígado, vesícula (que le ha tenido que ser extirpada) y en intestino delgado, además de la muerte del feto de 42 semanas que llevaba en su seno. La madre, C.J.H. también recibió varios disparos que le afectaron al abdomen, el glúteo, la pierna y el pie izquierdo.

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