La plantilla del Granada comenzó a preparar el partido del próximo domingo contra el Real Oviedo con un entrenamiento en el que no hubo ausencias, ya que no queda ningún jugador en la enfermería rojiblanca de baja médica.

Tras perder el sábado contra el Nástic de Tarragona (0-1) y descansar el domingo, el Granada completó en su ciudad deportiva la primera de las cinco sesiones de trabajo que el técnico José Luis Oltra ha planificado esta semana.

Una vez que el centrocampista Ángel Montoro se reintegró la pasada semana al trabajo de grupo y recibió el alta médica, el técnico ha podido contar con todos sus efectivos en un entrenamiento centrado en el análisis y la recuperación tras el pasado encuentro, informó el club a los medios.

Los rojiblancos completaron sobre el terreno de juego varios ejercicios de posesión en campo grande y fútbol reducido antes de que el grupo se dividiese en dos, pasando los jugadores que fueron titulares contra el Nástic a realizar trabajo compensatorio en el gimnasio y el resto, sobre el césped.

La primera plantilla rojiblanca descansará mañana para retomar el miércoles los entrenamientos de forma continuada hasta el desplazamiento del sábado a tierras asturianas, donde el domingo se medirá al Oviedo, rival directo de los andaluces en la pelea por el ascenso.