Uno de los acuerdos más emotivos adoptados durante el Pleno de la Corporación Municipal celebrado el pasado lunes fue la aprobación, por unanimidad, del cambio de denominación de la calle Pablo VI de la aldea de Sotogordo, que a partir de ahora se llamará Rafael Pozo Bascón, en homenaje y reconocimiento a la trayectoria vital de uno de los vecinos más ilustres de la pedanía. Esta petición ha sido cursada por la Asociación “La Verde Oliva”, que durante el pasado otoño recogió más de 200 firmas de vecinos de la aldea solicitando que el Pleno otorgase una calle a un hombre bueno e íntegro que siempre se ha desvivido en atenciones hacia sus paisanos.
Rafael Pozo Bascón nació en El Palomar en 1941. Con tan sólo 11 años, en 1952, ingresó en el seminario de Antequera, y trece años después, en 1965, fue ordenado sacerdote. Con 28 años fue misionero en Guatemala, y en 1972 regresó a Puente Genil, ejerciendo su ministerio como párroco en nuestra localidad. Ya en 1977 se hizo cargo de la revista “El Adalid Seráfico”, y dos años más tarde, en 1979 fundó la Asociación Protectora de Deficientes Psíquicos “Paz y Bien”, una entidad encargada de atender las necesidades de las personas con discapacidad intelectual. En 1994, Fray Rafael Pozo puso en marcha la Fundación Tutelar TAU, que en la actualidad ejerce de manera desinteresada 230 cargos repartidos por toda la geografía andaluza, y la Granja Escuela en la Finca San Buenaventura, que se convirtió en uno de los proyectos más novedosos en materia de integración social, permitiendo la creación de una red de viviendas para menores en situación de desamparo.
Del mismo modo, también en la década de los ‘90 comenzó a proyectar Sierra Luz, una iniciativa pionera en Andalucía y uno de los escasos centros turísticos con total accesibilidad que existen en Andalucía. En 2004, con motivo de la celebración del 25º aniversario de “Paz y Bien” presentó ante sus paisanos y vecinos de Sotogordo el libro “Conquistas desde la Humanidad” donde se recoge su biografía y la obra realizada. Tres años más tarde, en 2007, puso en marcha un nuevo proyecto en Guatemala, con la creación de un Centro de Promoción Social donde se llevan a cabo programas escolares y atención sanitaria, y además existe un centro ocupacional. Fray Rafael Pozo cuenta en la actualidad con numerosas distinciones como el Premio Reina Sofía de Integración y Rehabilitación, Premio Acciones Solidarias en Guatemala, el Premio Huelva de la Junta de Andalucía, y la propia Medalla de Oro de la ciudad de Huelva, otorgada en el año 2012. Asimismo, Rafael es todo un referente para sus vecinos, que lo admiran, lo aprecian y le profesan un gran cariño muy palpable y visible cada vez que regresa a su tierra para reencontrarse con los suyos.