López Cobos, el director artístico del Real, Antonio del Moral, y el director general, Antonio Muñiz, presentaron ayer la temporada 2009/2010, que, según este último, no sufrirá, pese a la crisis, “merma alguna” respecto a las anteriores “ni en calidad ni en número de espectáculos”.
La programación de ópera, 16 obras en 120 funciones, se abrirá el 28 de septiembre con Lulú, de Alban Berg, y concluirá con Simón Bocanegra, el Verdi con el que López Cobos “pasará página” el 29 de julio del año que viene, sólo un mes antes de que se extinga su contrato con el Real tras siete temporadas con la batuta del coliseo.
Para Antonio del Moral, que se incorporó al Real en 2003, será también su última temporada, 199 espectáculos que ha querido seguir apoyando en los “pilares” de estar abierto a nuevos públicos –casi 53.000 espectadores más en 2008 que en 2003– con una oferta multidisciplinar “equilibrada” y la elección de los “mejores e idóneos” para cada repertorio.
Las óperas elegidas en esta ocasión, además de Lulú y Simon Boccanegra, Theodora (versión concierto), La vera costanza, L’italiana in Algeri, Agrippina (versión concierto), Jenufa, Der fliegende Holländer, Andrea Chénier, L’arbore di Diana, Salome, Il viaggio a Reims, I puritani (versión concierto), L’incoronazione di Poppea, Norma (versión concierto) y Die tote Stadt.
“Es la segunda vez que me marcho de España así, bateado”, reconoció López Cobos y lamentó que éste sea un país en el que los proyectos a largo plazo “son imposibles de realizar”.
Leyó al comenzar la rueda de prensa de presentación de la temporada 2009/2010 un texto en el que anunció que, a su ya conocida rescisión del contrato con el Real, no le seguirá “ningún proyecto” similar. “Ni me quedan muchas ganas de tenerlo”, dijo.
“Quiero poner un freno en mi actividad (operística) y relanzar mi actividad internacional”, por ello tiene ya previstas varias actuaciones en 2010 en el teatro de la Bastilla (París) y en 2011 en Viena y en Ginebra.
