Este sábado 5 de febrero el público del Teatro Municipal Vicente Espinel asistirá a la representación de una tragedia griega como nunca antes se la habían contado. En ‘El viento es salvaje’, la compañía teatral Las Niñas de Cádiz mezcla cultura popular con tradición culta para narrar el mito de Fedra y Medea con vientos de levante y chirigota carnavalera. Una función que hace un año se hacía con el Premio Max de las Artes Escénicas a Mejor Espectáculo Revelación y que se sirve del humor para contar en verso dramas cotidianos que no tienen época, como la culpa o los celos.
“El punto de partida es cómo se cuentan las cosas desde el sur, concretamente desde el sur del sur. De esto que alguien te cuenta una tragedia muy grande que le ha pasado o algo que está viendo que va a ocurrir, pero tú te tienes que reír de la situación.
Esta cosa que tenemos en el sur de que las penas aligerándolas se llevan mejor”, argumenta la actriz y también productora de la compañía Alejandra López, que subirá al escenario junto a Rocío Segovia, Ana López Segovia y Teresa Quintero. Asegura, sin un ápice de duda, que “las cosas más surrealistas de la función han ocurrido en realidad” y revela que una de las formas más eficaces para acercar un clásico como estas tragedias de Eurípides es identificar qué pasiones o sentimientos en sus personajes nos son comunes a todos por su universalidad.
El elenco se ha servido de experiencias e historias propias, cotidianas, anécdotas que contaran con ese eco trágico que pudiera equipararse con la historia original, al menos en su trasfondo. Es así cómo han logrado hasta la fecha conectar con el público, trayendo a colación constantemente elementos reconocibles de Cádiz y haciendo del drama comedia, y ese estile les ha valido múltiples reconocimientos, desde Málaga hasta Vigo.
Las Niñas de Cádiz incorporan a una trama de plena actualidad elementos de la tragedia griega como la figura del mensajero, como portador de malas noticias; un coro que comenta lo que va aconteciendo a los protagonistas, en este caso materializado en un grupo de vecinos, o el reto a la divinidad.
Pero ¿en qué momento vieron que, claramente, lo que describían esas tragedias griegas eran elementos propios, por ejemplo, del carnaval? López recuerda que, cuando estudiaba la comedia de Aristófanes Lisístrata, en la que abundaban enfrentamientos sociales, rencores e indirectas, ella pensaba: “Esto es el Falla”.
Las actrices se iniciaron con la compañía teatral ‘Chirigóticas’ tras sus primeras actuaciones en lo que se conoce como el ‘carnaval ilegal’ de Cádiz, constituyendo en 1997 una formación femenina pionera de estos festejos bajo el nombre de ‘Las Niñas’.
Alejandra reconoce que, con el paso de los años, se ha hecho a trabajar con sus hermanas, Ana y Rocío, y aunque admite que no ha resultado sencillo en ocasiones, siempre han intentado darle a la compañía esa visión empresarial que ha requerido para salir adelante sin importar las desavenencias que han surgido. Finalmente, López advierte que el elenco traerá a Ronda “un humor negro, negrísimo, pero respetuoso”.