Varias hermandades con el fin de ayudar a las familias necesitadas y apoyar la labor de Cáritas de su parroquia, están pidiendo que se lleven alimentos a los pies de los titulares, en lugar de flores o cera.
Esta decisión, vista como una iniciativa apropiada al momento, está viéndose por los profesionales del sector de la flor como una campaña que afecta directamente a sus intereses, en unos tiempos donde también acusan la crisis económica y la disminución de ventas. Una disminución que se acrecienta ante los mensajes que se dan por varias hermandades con objeto de que cambien la ofrenda de flores por la de alimentos.
En parroquias como San Francisco o San José Artesano, entre otras, se han depositado canastos a los pies del altar de los titulares para que se depositen alimentos. En el caso de la iglesia de San José Artesano, la hermandad de la Resurrección ha bajado a la Virgen de la Victoria de su altar y la ha dispuesto en actitud petitoria, con un cartel que reza “No preciso ni flores, ni cera, pero mis hijos sí necesitan alimentos”.
Las floristerías cercanas a los templos y aquellas que sirven a las hermandades y cofradías o a los fieles en general, están viendo cómo este mensaje cofrade cambiar flores por alimentos está entrando en la sociedad y ven amenazado su negocio, con lo que temen por tener que asumir pérdidas que llevarían al cierre.
