Los padres y madres de más de un centenar de alumnos de los colegios Vicente Tofiño y Juan Díaz de Solís han visto de la noche a la mañana como sus hijos se han quedado sin aula matinal y comedor escolar para el próximo curso 2015/16 desde el mes de septiembre hasta junio, con el desagravio que para ellos les supone, puesto que sus obligaciones laborales les impiden a la mayoría poder atender a sus pequeños durante esas dos franjas horarias del día.
Ambos centros comparten año tras año el comedor del Tofiño dadas sus grandes dimensiones y, al parecer, el motivo de que las plazas se hayan quedado reducidas a un total de 115 alumnos es debido a que por parte de la Junta se va a contratar a menos personal para atender el comedor. Al menos esa es la explicación que le han dado a Inmaculada Martínez, madre de uno de los pequeños afectados.
Para más inri, y según esta madre, el proceso de selección por el que se ha escogido a los niños que sí podrán gozar del comedor el próximo curso ha sido aleatorio. “Todos habíamos entregado nuestros certificados de que estamos trabajando y también los números de cuenta corriente, porque el comedor nos cuesta a todos dinero salvo a algunas familias que si tienen una pequeña ayuda”, señala y añade que “pero nuestra sorpresa ha sido cuando hemos visto que nuestros niños se han quedado fuera y que la forma de escoger ha sido aleatoria”.
La situación ha derivado en que un grupo de madres se haya trasladado este miércoles hasta la Delegación Provincial de Educación en Cádiz para aportar incluso ellas una solución, que pasaría por destinar el dinero que abonan para el pago de servicio en la contratación de una monitora más.
“Sin embargo hemos estado allí más de dos de horas delante del despacho del jefe de Planificación y Escolarización, Joaquín Mateo Sánchez, sin que nos haya recibido y lo único que nos ha dicho su secretaria es que no recibe sin cita previa”, apunta Inmaculada Martínez, quien no entiende que “desde la Junta se esté vendiendo durante los últimos días lo de los comedores gratuitos durante todo el verano y a nosotros nos hagan esto. La pregunta de todas las madres que estábamos allí era clara; ¿y ahora qué hacemos con el niño?”. Han optado por poner una queja colectiva y también individual contra la propia Delegación Provincial de Educación.
En concreto, los menores afectados por esta medida son 36 del aula matinal y 86 del comedor en el Tofiño y 33 del aula matinal y 15 del comedor en el Solís.