La Audiencia Nacional ha ratificado la sanción de 84.620 euros a la empresa sanluqueña La Ibense Bornay con sede en Jerez de la Frontera, en relación al acta de infracción levantada contra la mercantil tras una inspección laboral a mediados de enero de 2012.
En una visita de inspección a la fábrica, los inspectores de trabajo comprobaron diversas irregularidades laborales cometidas por la empresa, entre las que recogieron en el acta la “fuga” de once trabajadores que ‘escaparon’ de la fábrica al tener conocimiento de la presencia de los inspectores, así como la detección de cinco trabajadoras que no estaban dadas de alta en el momento de la inspección.
En base a estos hechos, la Inspección de Trabajo levantó acta de infracción a la empresa por obstrucción a la labor inspectora proponiendo una sanción de 100.006 euros que posteriormente fue rebajada a 84.620 euros.
RECURSO CONDENA
La empresa recurrió a la Audiencia Nacional, quien el pasado 8 de abril ratificó la sanción impuesta inicialmente a la mercantil Bornay Deserts S.L. ratificándose la sentencia en los motivos que propiciaron la sanción por parte del Ministerio de Trabajo. La Audiencia desestimó los argumentos esgrimidos por la empresa, que pedía que se eliminara o rebajara en todo caso la sanción impuesta, alegando, entre otras cuestiones, la imposibilidad de que se hubiera producido una ‘fuga de trabajadores’ al estar el perímetro de la fábrica vallado y existir sólo una puerta y considerando falso el testimonio del subinspector, aludiendo a las grabaciones de la cámara de seguridad. Sin embargo, el abogado del Estado se opuso a la demanda considerando que sí hubo oposición a la labor del subinspector, señalando que al entrar éste en una de las salas en la sección de pastelería “huyeron 11 trabajadores que no fueron identificados en ningún momento por la mercantil”.
En la mencionada visita del equipo de inspección laboral a la empresa con sede en Jerez, además de la huida de estos once trabajadores, los inspectores constataron que cuatro empleadas de la fábrica, que alegaron haber comenzado a trabajar ese mismo día no estaban dadas de alta, comprobándose después que fueron dadas de alta a fecha 26 de enero con efectos al 16 de enero, cuando la inspección fue el día 17 de ese mes. Además, otra de las trabajadoras que fue identificada, no fue dada de alta en la Tesorería General de la Seguridad Social.
La empresa no presentó relación de trabajadores alegando que el sistema de fichaje “estaba averiado” pese a lo que los inspectores comprobaron por testimonio de otros empleados que habían fichado esa misma mañana. En cuanto a las grabaciones de vídeo, La Ibense Bornay entregó una grabación de tres minutos de algunas de las salas, si bien la visita de inspección duró más de dos horas. Por todo ello, la Audiencia ha ratificado que la empresa cometió una falta “muy grave” y la ha sancionado con el pago de 84.620 euros por no identificar a sus empleados a instancia de los inspectores.