La Fundación Cajasol abrió este jueves su exposición Lumen Lúmine . Conservación preventiva de las vidrieras en la Catedral de Sevilla que estará abierta al público hasta el 24 de junio.
Preservar este bien de incalculable valor y belleza que merece sin duda una mayor divulgación y reconocimientoEl acto inaugural se celebró en la sala Vanguardia de la sede de la fundación en la que estuvo presente el presidente de la entidad, Antonio Pulido, el obispo auxiliar de la Archidiócesis de Sevilla, Ramón Valdivia, y el arquitecto-conservador de la Catedral y comisario de la exposición Jaime Navarro.
Una exposición que tiene como objetivo “mostrar las labores de conservación del monumental repertorio de vidrieras históricas que atesora la Catedral de Sevilla”, según Jaime Navarro.
Con esta muestra lo que se quiere es aprovechar para divulgar toda la información que permita acercar al público las obras y que entiendan y comprendan el valor y la importancia que supone este patrimonio para Sevilla. “Las vidrieras de la Catedral, pese a sus imponentes dimensiones, están, en su mayor parte, a gran distancia del observador y supone una mayor dificultad para contemplarlas y disfrutarlas.
Por este motivo, suelen ser unas grandes desconocidas para el gran público. Con esta exposición y este catálogo pretendemos acortar esta distancia y acercarlas al espectador; así como dar a conocer a los artistas que las hicieron, ubicarlas en el tiempo y en el espacio, dar unas nociones de cómo fueron construídas y como han sido restauradas, de modo que sea más fácil el disfrute de este patrimonio”, apuntaba el arquitecto.
Y es que como dijo Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol, con esta muestra “tenemos la oportunidad de conocer en profundidad un tesoro no suficientemente valorado”.
Fruto de la colaboración especial entre la Fundación y el Cabildo Catedral, el proyecto tiene como objetivo darle visibilidad e impulso a esta exposición a la que se suma la edición de una publicación escrita, obra de los técnicos responsables del proyecto, y que recoge la labor de conservación y mantenimiento de las vidrieras durante las últimas dos décadas.
Por otro lado, Valdivia señalaba el origen del nombre que da título a esta exposición: “Las vidrieras dejan traspasar esta luz a través de los muros, como si fuera la presencia de Jesucristo resucitado en el día de Pascua. Dios es luz de luces, Lumen de Lúmine”. Una experiencia llena de luz y color en la que podemos descubrir un cachito de nuestra historia.
La muestra permanecerá abierta al público hasta el 24 de junio, en horario de 11:00 a 14:00 horas y de 18:00 a 21:00 horas, de lunes a sábados. Los domingos y festivos permanecerá cerrada.