Cuatro de las ocho comisarías de distrito de la capital hispalense carecen de armeros en sus dependencias para que los agentes depositen a buen recaudo sus armas reglamentarias cuando no se están utilizando, por lo que los policías tienen que cargar con ellas hasta sus domicilios, con el peligro que ello conlleva no sólo ya en el trayecto sino para la propia integridad de su familia; o bien dejarlas en las taquillas -algo que prefieren a lo anterior- o trasladarse, una vez terminada su jornada laboral, hasta la jefatura central en la comisaría de la Ranilla (en Nervión) para poder depositarlas en un armero.
La Policía Local lleva reclamando durante cuatro años la instalación de armeros en todas las dependencias policiales y una solución al Ayuntamiento, propietario y responsable civil de las armas, obteniendo tan sólo “buenas palabras”. La última vez ha sido a través de una carta enviada al Consistorio por la sección hispalense del Sindicato profesional de Policías Municipales (Sppme) en la que su presidente, Manuel Bustelo, reclama al delegado de Seguridad y Movilidad, Juan Bueno “que imponga las medidas oportunas para que ningún Policía Local se vea obligado a llevarse el arma reglamentaria a su domicilio” y responsabilizando al delegado “de cuanto pudiese acontecer por no cumplirse esta solicitud” -en relación a posibles accidentes por tener que guardar el arma en casa-.
Sólo en cuatro comisarías
En esta carta, a la que ha tenido acceso Viva Sevilla, el Sppme recuerda al Ayuntamiento hispalense que los agentes (responsables subsidiarios de las armas) no pueden llevárselas a sus domicilios sin una autorización expresa por parte de la Dirección General de la Guardia Civil-Intervencción de Armas y Explosivos “en cumplimiento a lo publicado en su día en la orden del Cuerpo”.
Este requisito legal ha originado en varias ocasiones problemas a los policías con la Guardia Civil por el hecho de tener que desplazarse a sus casas con el arma (muchos viven fuera del término municipal de Sevilla) y sin la autorización administrativa.
A pesar de las quejas, a día de hoy, cuatro de las ocho comisarías de distrito (las de Nervión, Centro, San Pablo, Triana-Los Remedios) continúan sin armeros, algo por lo que el sindicato ha solicitado una reunión con el delegado de Seguridad, que se producirá esta semana y en la que tratarán otros temas como que se valore con una mayor retribución económica el trabajo de los policías motorizados, por la peligrosidad que conlleva su labor.