La Universidad de Sevilla (US) alberga este lunes la convocatoria de un Comité de Salud y Seguridad que, presidido por la vicerrectora de Servicios Sociales y Comunitarios, Ana López, y con presencia de los delegados de Prevención de la plantilla docente e investigadora (PDI) y de administración y servicios (PAS), se celebrará con un único punto en el orden del día, el de debatir la situación de "acoso" en base a determinados casos que se han dado en el seno de la Hispalense.
Así lo han precisado a Europa Press fuentes sindicales, que han indicado que la convocatoria surge a raíz del caso del catedrático Santiago Romero, que ha sido condenado a siete años de prisión como consecuencia de los abusos sexuales y lesiones cometidos contra dos profesores y una becaria de investigación de la Facultad de Educación.
Éste no es el único caso que se denuncia estos días. Esta semana se ha convocado una concentración en la puerta del Rectorado, en protesta por el caso de Encarnación Santamaría, profesora de la Facultad de Medicina, que fue expulsada de la universidad y de su plaza de funcionaria "de forma totalmente irregular, hace ahora más de nueve años, cuando se encontraba afectada por una crisis de ansiedad y estrés, resultado del ambiente en su puesto de trabajo".
"A esta docente no se tardó en expulsarla de la institución y de su condición de funcionaria por una resolución rectoral firmada de forma precipitada, 72 horas después de que la profesora pidiese un cambio de plaza, y sin razón fundada alguna, como así se ha demostrado en la información jurídica que la afectada, con el apoyo de la Junta de Personal, ha presentado al actual rector", exponían recientemente el Comité de Empresa Laboral y la Junta de Personal Funcionario de la US.
Para el SAT, en el caso de Romero --que ha motivado la dimisión del decano de Educación, Juan de Pablos, ya sustituido por Carlos Marcelo--, lo realizado por la universidad ha sido "totalmente insuficiente", por el hecho de no haberse suspendido al abusador cuando se detectaron indicios de delito. "No se sabe si Romero habrá seguido abusando de su poder y, en cualquier caso, nos parece que la universidad vuelve a responder de manera muy lenta", ha señalado el sindicato.