La calle Francisco Carrión Mejías, en pleno casco histórico de Sevilla, ha sido reabierta este viernes al tráfico rodado al ser finalizadas las obras acometidas en la misma para la renovación de sus redes de abastecimiento y saneamiento de aguas y la reurbanización de su calzada y aceras, según informa el Ayuntamiento hispalense.
Las obras, como había informado ya el Ayuntamiento respecto a esta actuación, han contado con un presupuesto de unos 324.000 euros y han incluido la ampliación del acerado a costa de una de las bandas laterales de aparcamiento, toda vez que a partir de octubre serán sembrados los nuevos árboles destinados a poblar este entorno próximo a la emblemática iglesia de Santa Catalina.
La actuación ha incluido además mejoras en la accesibilidad para que el diseño de la calle se ajuste a las exigencias actuales, toda vez que el concejal responsable del distrito Casco Antiguo, Juan Carlos Cabrera (PSOE), ha defendido que gracias a las obras, esta calle "es ahora mucho más transitable y presenta un aspecto totalmente renovado que quedará rematado con once nuevos árboles cuando entremos en la época de plantación".