El Real Betis celebró esta mañana el acto de renovación de Joaquín a la altura de su propia leyenda. Cerca de 10.000 aficionados verdiblancos ocuparon las gradas del Benito Villamarín en una celebración donde se respiró emoción y beticismo.
La entrega de los aficionados conmovió al propio Joaquín, tal y como él confesó al final del acto: “No tengo palabras para explicar lo que siente uno ahí abajo. Solamente puedo dar las gracias”.
El portuense intentó contener las lágrimas en varias ocasiones, consciente de que esta renovación pudo haber sido su última ampliación de contrato con el Betis: “Me da miedo pensar que es mi última renovación, pero posiblemente lo sea. El tiempo lo dirá. Es difícil saber cuál es el momento para dejarlo. La realidad es que posiblemente, según se den las circunstancias, sea mi último año”.
“Voy a ser honesto conmigo mismo. Mientras me vea compitiendo y siendo importante, seguiré. El día que yo vea que eso cambie me iré a comerme tortas de bacalao y a hacer lo que no puedo hacer normalmente”, aclaró Joaquín sobre el momento de su retirada.
Repasando su carrera, el capitán verdiblanco destacó quién ha sido el mejor futbolista con el que ha jugado: “He coincidido con muchos futbolistas, pero me quedo con Raúl González. Un tío como la copa de un pino y con el que tuve la suerte de compartir vestuario”. Y su momento más especial como bético: “Sin ninguna duda, el gol aquí contra el Sevilla”.
También señaló el crecimiento que ha visto en el club en estos últimos años: “Tengo mucha fe en que podamos levantar un título. Soy consciente del crecimiento de este club, levantar un título no es fácil pero yo tengo fe. Confío que este equipo dará mucho que hablar en corto plazo, Dios lo quiera”.
Además, habló sobre su futuro cuando deje su carrera como futbolista: “Cuando me retire me veo en la estructura del Betis. Me veo dentro de este club de una forma o de otra, en función de lo que pueda aportar. Mi vida está aquí dentro”.
Por último, quiso hablar de su nuevo contrato: “¿Mi contrato? Ruina gorda. Me han dicho: Joaquín tienes dos opciones, o firmas esto o te vas para tu casa".