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Sevilla

El alcalde de Bormujos: "El trifachito se ha puesto de acuerdo" para la moción

La confirmación de Cs de que explora "nuevas formas" es la constatación, según el alcalde, de que "se ha unido a la campaña de acoso y derribo"

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  • El alcalde de Bormujos. -

El alcalde de Bormujos (Sevilla), el socialista Francisco Molina, ha avisado este viernes de que al anunciar Cs la búsqueda de "otras fórmulas" de gobernabilidad en la localidad si Molina no dimite por el juicio que afronta por un presunto delito de prevaricación, "parece" que la formación naranja, que cogobierna junto al PSOE, "se ha unido" a la campaña de "acoso y derribo" que a su entender promueve el PP para desencadenar una moción de censura. "El trifachito ya se ha puesto de acuerdo", ha enfatizado Molina en declaraciones a Europa Press.

Francisco Molina se ha pronunciado de este modo después de que expirase el plazo de 48 horas dado por Cs al PSOE para que adoptase una "decisión definitiva sobre" su "necesaria dimisión" (según Cs) y la de la concejal de Educación y Obras Públicas, la también socialista Carmen Garfia, a cuenta del juicio que ambos afrontan por un presunto delito de prevaricación en la autorización de unas obras en una nave municipal pese a contar con informes desfavorables de la Intervención y del arquitecto municipal.

Y es que tras expirar dicho plazo, el portavoz municipal de Cs y primer teniente de alcalde en el Gobierno local de coalición conformado entre el PSOE y Cs, Manuel Romero, ha asegurado que si el PSOE no "rectifica inmediatamente" y promueve la dimisión de Molina como alcalde, Cs tendrá que "trabajar en otras fórmulas para garantizar la gobernabilidad" de Bormujos.

EL PAPEL DEL PP

Francisco Molina, en ese sentido, viene defendiendo que la citada causa judicial ya era conocida e incluso había sido tratada en el pleno, avisando de una "campaña de acoso y derribo" del PP para "desestabilizar al Gobierno municipal" de coalición, después de que no prosperase el acuerdo promovido entre el PP, Cs y Vox para superar la mayoría simple de los socialistas en la sesión de investidura de 2019.

Y es que el PP ha reclamado insistentemente a Cs que rompa su acuerdo de gobierno con el PSOE, señalando la situación judicial del alcalde y su concejal de Obras Públicas.

En ese contexto, Francisco Molina ve "sorprendente y hasta cierto punto indignante" que mientras el PSOE está "centrado en trabajar por Bormujos" en este "momento crítico" de la tercera oleada de coronavirus Covid-19 y la nueva crisis derivada de la pandemia, acontezca este "teatrillo" político. "No es el momento de generar problemas añadidos a esta crisis sociosanitaria", ha considerado.

LA "CAMPAÑA DE ACOSO Y DERRIBO"

Por eso, ha vuelto a reprochar al PP su campaña de "acoso y derribo" para forzar una moción de censura, opinando que "al parecer", Cs "ya se ha unido" a tal campaña. "El trifachito ya ha llegado a un acuerdo", ha avisado, explicando que "desde el pasado mes de septiembre", las fuerzas de la derecha han ido "construyendo un relato" para llegar al punto actual de la disyuntiva entre su dimisión "o la moción de censura" en su contra.

Todo ello, con "un argumentario que no se sostiene" entre las propias filas de los grupos municipales del PP y Cs, pues según ha recordado, el concejal del PP Luis Paniagua fue condenado por una agresión ilegítima contra el honor y la propia imagen del excandidato de Cs a la Alcaldía de Dos Hermanas Manuel Varela cuando Paniagua era edil en dicho municipio y la edil de Cs Cira de la Cruz fue condenada por agresión a una militante de su partido. "Tienen en sus filas a gente condenada en firme", ha aseverado Molina, acusando al PP y Cs de una "doble vara de medir".

"UN VOTO DE CONFIANZA"

En ese sentido, ha defendido que había solicitado a Cs "un voto de confianza" hasta la celebración del juicio, fijado para el 14 de junio, asegurando que dimitirá si finalmente resulta condenado por unos hechos que, según alega, no implican "corrupción política".

En paralelo, Francisco Molina ha lamentado los "eufemismos" de Cs, avisando de que "una nueva forma de gobernabilidad no es otra que pactar con Vox", o sea con "la ultraderecha", considerando que tras las últimas declaraciones de Manuel Romero, "lo coherente" es que los concejales de Cs renuncien a sus competencias de gobierno en lugar de continuar ejerciéndolas.

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