Un exmayordomo de la hermandad sevillana del Valle será enjuiciado a partir de mañana por presuntamente apropiarse de algo más de 175.000 euros aprovechándose de su cargo en la corporación, unos hechos por los que la Fiscalía pide que sea condenado a tres años y medio de cárcel.
La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Sevilla será la encargada de juzgar a A. M. C. L., para quien el Ministerio Público solicita prisión y una multa de 1.800 euros por un delito continuado de apropiación indebida y que indemnice a la hermandad con 175.982,88 euros.
El procesado fue mayordomo desde junio del 2007 a junio del 2015, de modo que administraba los bienes de la hermandad, controlaba los gastos, recaudaba el dinero de las cuotas de los hermanos y tenía acceso a la cuenta bancaria de la corporación.
También debía informar al cabildo de oficiales cada tres meses y rendir cuentas anualmente, según consta en el escrito de calificación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Efe.
El hermano mayor y otro hermano lo ayudaban, pero en realidad "se limitaban" a llevar la contabilidad "con los datos que le facilitaba el procesado".
Hasta el 2011 "se contrastaban los movimientos y saldos bancarios" que A. M. C. L. entregaba al cabildo, pero el control de lo que recibía en metálico y debía ingresar en la caja "era imposible" porque "nadie de la junta o el cabildo hacía recuento", de modo que "parte de este dinero pasó a formar parte del peculio personal de acusado".
En el 2011 hubo cambio de hermano mayor y entonces, "sin el debido control de la cuenta bancaria por parte ningún responsable de la hermandad", el mayordomo empezó a "expedir cheques, sobre todo al portador, que cobraba por ventanilla y de cuyo importe en buena medida se apropiaba".
También se quedaba "parte de los ingresos" que recibía la hermandad, "sin perjuicio" de que algunas cantidades sí se destinaran a pagar gastos "reales" de la corporación.
Para "ocultar las cantidades de las que se apoderaba", A. M. C. L. copiaba "en una hoja de Excel" los movimientos de la cuenta y después los "modificaba a su antojo", así que creó "una cuenta o banco paralelos" que presentaba al cabildo y "manipuló" sobre todo los gastos, muchos de los cuales "no se habían hecho".
Tras ser sustituido el 15 de junio del 2015, explicó al cabildo que había 26.939 euros en la cuenta de la hermandad, aunque "sólo había 16,41", lo que dio lugar a "las oportunas investigaciones".
El 4 de diciembre, A. M. C. L. confesó al hermano mayor y al fiscal de la hermandad que había una deuda de 77.152,07 euros por "distracción de fondos" y se comprometió a devolver el dinero el día 27.
También firmó dos pagarés de 67.000 euros, pero los responsables de la cofradía certificaron en el banco que "no tenían provisión de fondos".
"Más adelante" mandó al hermano mayor una fotografía de una transferencia de 70.000 euros que "nunca existió".
El 12 de febrero del 2016 reconoció por escrito una deuda de 56.874,93 euros, se comprometió a colaborar en la reclamación judicial que hiciera la hermandad e incluso autorizó el embargo de su sueldo.
Un asesor fiscal contratado por la hermandad estableció el perjuicio en 119.134,95 euros en los cinco ejercicios entre el 2011 y el 2015, mientras que el perito judicial calculó que el "descuadre" en las cuentas oficiales fue de 219.660,26 euros en ese lustro.
En total, la Fiscalía cuantifica la apropiación en los 56.847,93 euros "reconocidos por él mismo" en febrero del 2016 más los 119.134,95 euros señalados por el asesor de la hermandad.