La Policía Nacional ha detenido en las provincias de Málaga y Alicante a los cuatro cabecillas de una organización dedicada al tráfico de drogas en varios países europeos, donde distribuían las sustancias a través de transportistas en dobles fondos de vehículos de alta gama.
La operación, realizada conjuntamente con las policías alemana, francesa y neerlandesa, Eurojust y Europol, se ha saldado con 22 detenidos en España, Francia, Países Bajos y Rumanía, ha informado la Dirección General de la Policía.
Seis de los arrestados estaban asentados en las localidades de Altea (Alicante) y Marbella (Málaga), donde pese a llevar un "altísimo nivel de vida" pasaban desapercibidos tras haber adoptado un perfil discreto.
Residían en las urbanizaciones más exclusivas de dichos municipios, conducían coches de lujo y ostentaban relojes y joyas valorados en cientos de miles de euros.
Tras su detención, la Audiencia Nacional ha decretado prisión provisional para todos ellos.
La actividad de los cuatro cabecillas y los otros dos miembros de la organización asentados en España consistía en mover grandes sumas de dinero y droga a través de transportistas en dobles fondos de coches de alta gama.
En la operación han sido intervenidos 2,6 millones de euros, más de 55 kilos de cocaína y 1,3 kilos de heroína.
Las primeras investigaciones, en verano de 2021, identificaron a uno de los cabecillas de la organización en España: un hombre con nacionalidades turca y neerlandesa que residía en Altea, desde donde controlaba el tráfico de cocaína y marihuana de todo el Levante español.
Los avances en la investigación constataron el "modus operandi" de la organización, cuyos miembros adquirían la droga en España para su posterior distribución por Europa, todo mediante vehículos con dobles fondos que utilizaban las rutas comerciales terrestres hacia otros países.