Así lo manifestó a los periodistas la consejera de Economía y Hacienda de la Junta, Carmen Martínez Aguayo, tras la reunión de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales que presidió el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, en la sede del Ministerio de Economía.
Martínez Aguayo señaló que, tras la firma del acuerdo, Andalucía recibirá un anticipo de 900 millones de euros.
Con el nuevo sistema de financiación, Andalucía recibirá un total de 3.133 millones, de los cuales 1.795 corresponden a fondos adicionales, 390 millones a la aplicación real del modelo y otros 948 como asignaciones que tienen que ver con competencias exclusivas de la comunidad.
Estas últimas se refieren en concreto a la gestión del Guadalquivir y a los gastos de explotación del metro andaluz.
En cuanto a la decisión del PP de aceptar el nuevo modelo después de tanta crítica, la consejera dijo que es una actitud que se descalifica por sí misma.
Por su parte, el secretario general del PP-A, Antonio Sanz, aseguró que Martínez Aguayo sella el "incumplimiento" del Estatuto y un sistema "claramente perjudicial" para la comunidad, que hará que Andalucía sea la "gran perjudicada" y que, de situarse entre los "primeros puestos" de financiación per cápita, "pase a los últimos".
En concreto, el dirigente popular explicó que, según un estudio realizado por el Instituto de Análisis Económico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Andalucía descenderá del puesto número ocho, en el que actualmente se encuentra, al puesto número 15 del conjunto de las autonomías en financiación per cápita, "perdiendo entre seis y nueve puntos".
Por su parte, el coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, aseguró que el nuevo modelo de financiación autonómica impedirá que Andalucía logre en los próximos seis años la convergencia en sectores como la educación, la sanidad, los servicios sociales o la vivienda con el conjunto de España y de Europa.
Valderas criticó que el Gobierno andaluz, al que calificó como el "menos autonomista y el más sumiso" con el Estado, vaya a "bendecir" un modelo de financiación autonómica que, a su juicio, no sólo es "perjudicial" para la comunidad, sino también "insuficiente e insolidario".
Por último, Valderas afirmó que el nuevo modelo no es "ni mucho menos" el mejor instrumento para dar cumplimiento al Estatuto de Autonomía de Andalucía.
