La obra para dotar de una red de saneamiento de ocho kilómetros de longitud a la urbanización El Rosario y que beneficiará a los cerca de 3.000 vecinos de la zona comenzará el próximo año 2022, “a falta de concretar con los mismos si tendrá lugar antes o después del verano”. Así lo ha anunciado hoy la alcaldesa, Ángeles Muñoz, tras la celebración de la Junta de Gobierno Local, que ha dado luz verde al acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento, la empresa pública de aguas Acosol, dependiente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, y la comunidad de propietarios para la ejecución de este proyecto, al que seguirán intervenciones similares en Hacienda Las Chapas y Costa Bella, cuyos trámites se encuentran ultimándose. La regidora ha recordado que esta primera actuación contará con un presupuesto de licitación de 4 millones de euros, cofinanciado en un 50 por ciento por el Consistorio, en un 25 por ciento por Acosol y el 25 por ciento restante por la comunidad de propietarios de El Rosario.
La primera edil ha subrayado que la iniciativa, que se licitará por parte de Acosol y que tienen un plazo de adjudicación de unos cuatro meses, “repercutirá tanto medioambiental como urbanísticamente en las 595 viviendas de la zona y responden al compromiso que adquirimos desde el Ayuntamiento”. En este sentido, los trabajos supondrán la adaptación de la urbanización a lo que marca la normativa en el ámbito medioambiental. “Es una obra que lleva a cabo todo el abastecimiento y, por lo tanto, toda la red de canalización, de bombeo y todo el saneamiento integral de todas y cada una de las parcelas, así como la reposición posterior de la zona de la calzada”, ha señalado Muñoz, quien ha concretado que “se eliminarán todas las fosas sépticas existentes, se realizará un buen sistema de alcantarillado que evite problemas de inundaciones y se mejorará, de esta forma, el servicio público de agua y de saneamiento”. Del mismo modo, ha recalcado que “hasta el momento, al no estar su estado acorde a la ley, no se podían autorizar ni licencias nuevas, en las 167 parcelas vacantes en la zona, ni de rehabilitación de viviendas antiguas, algo que también va a posibilitar el proyecto”.
La alcaldesa ha apuntado que la idea es que “esta misma fórmula se traslade a otras urbanizaciones del término” y ha destacado que estas obras “van a suponer que tanto el saneamiento como el abastecimiento -muchas de las zonas cuentan para ello con sus propios pozos- sean de carácter municipal, lo que permitirá mejores controles de calidad y medioambientales”. “Además, servirán para que puedan seguir desarrollándose dichas urbanizaciones”, ha resaltado.