El coro de San Fernando, que el año pasado dejó buenas sensaciones llegando a cuartos de final, llegó al Gran Teatro Falla a bordo de un dirigible para cazar los sueños de los miles de gaditanos que habitan la provincia.
El primer tango, de presentación, sirvió para redundar en la idea del tipo avisando de que no quieren despertar de su sueño. El segundo denunció la xenofobia sufrida por los inmigrantes españoles en otros países.
Los cuplés, en cambio, fueron dedicados a la exhumación de Franco y a los sueños de los famosos. Buen primer pase del coro.