El Pleno de la Diputación de Cádiz ha aprobado de forma inicial el presupuesto para 2025 esta mañana, en sesión extraordinaria, con los votos de los socios de Gobierno, PP y La Línea 100x100, y el representante de IU, Ricardo Galán, en la Corporación.
El PSOE ha votado no porque, según la portavoz del grupo socialista, Ana Carrera, las cuentas “no atienden las necesidades de la institución provincial” ni de los municipios, salvo los que tienen alcaldes al frente del PP o La Línea 100x100.
En este sentido, ha lamentado que los primeros ocho diputados del Gobierno provincial pertenezcan a localidades de más de 80.000 habitantes y traten con los presupuestos de arrimar el mayor número de fondos a sus localidades, La Línea, Jerez, Algeciras, El Puerto o Cádiz, en detrimento de las de menos de 20.000 habitantes.
Además, ha indicado que entre esos ocho responsables políticos hay “una lucha de poder” para controlar más cantidades económicas.
Finalmente, ha acusado a PP y La Línea 100x100 de no destinar suficiente gasto a mantenimiento de carreteras, no invertir lo suficiente en turismo, política de aguas o de empleo y ha advertido de que ha habido un tijeretazo de dos millones de euros en Servicios Sociales como paso previo “a la privatización” de las residencias de mayores y los centros de días.
La presidenta de la Diputación, Almudena Martínez, ha indicado al respecto que esos dos millones que no aparecen en los presupuestos era una subvención para la construcción de un centro de Asansul en el Campo de Gibraltar que ya ha finalizado.
Por su parte, el portavoz del Gobierno provincial, Juancho Ortiz, ha acusado a Carrera de “mirar los presupuestos de 2020 o 2021 o de no vivir en la provincia”, porque hay incrementos presupuestarios en todas las áreas. No en vano, son las cuentas con un monto mayor, con más de 377,5 millones de euros, con un crecimiento del 13,4% respecto a las cuentas en vigor, y 389,4 millones de euros como presupuesto consolidado, 51 millones de euros más.
Entre otras partidas, ha destacado que las inversiones suben un 19,6%, hasta alcanzar los 81,3 millones de euros, con 3 millones de euros para el Plan de Carreteras, otros 3 para Valcárcel y 3,8 para el Instituto Rosario, en la capital, que acogerá la Escuela de Hostelería.
El Área de la Vicepresidencia 4ª de Planificación, Coordinación y Desarrollo Estratégico dispondrá, por su parte, 45,8 millones de euros para el fomento del empleo. El IEDT dobla su presupuesto y Plan de Empleo está dotado con 5,7 millones de euros, un 6,4% más elevado el Plan de Cooperación Local de 2023.
Asimismo, Ortiz ha destacado que el Gobierno provincial blinda las políticas sociales, con casi 65 millones de euros, tras mejorar las condiciones laborales y la cobertura del servicio de Ayuda a Domicilio, y ha adelantado la creación de un Plan de Cooperación dotado de 8,3 millones de euros, que unificará todas las ayudas y colaboraciones con ayuntamientos y ELAS, o el Plan Integral de Transición Ecológica que incluirá una línea de ayudas de 600.000 euros para localidades de menos de 20.000 habitantes.
“Son unos presupuestos expansivos”, se ha felicitado, abriendo un nuevo frente de debate con la portavoz socialista. Carrera le ha recordado que la Diputación de Cádiz cuenta con más recursos por el incremento de la PIE por parte del Gobierno de España hasta los 43 millones de euros.
Ortiz ha replicado que esos 43 millones de euros se deben, por un lado a la gestión en Recaudación de la institución provincial, y, por otro, por el sablazo del Ejecutivo a los contribuyentes con incrementos reiterados de la presión fiscal.
Ambos se enzarzaron en otro cruce de declaraciones cuando el portavoz del Gobierno provincial acudió al anexo de inversiones para evidenciar que también hay previstas actuaciones en localidades gobernadas por el PSOE. Carrera le afeó que leyera el listado de proyectos del Profea.
Si bien hasta el momento el debate había discurrido dentro de lo previsto, el diputado de IU, Ramón Galán, sorprendió con una intervención en la que valoró positivamente los presupuestos, tanto en lo referido a política social, como en las inversiones previstas para los municipios de menor población y la apuesta por el medio ambiente.
Quiso cuestionar algunos aspectos de las cuentas, pero solo se quedó en la advertencia sobre su correcta ejecución.
Por ello, votó a favor, dejando al PSOE en solitario con un no y el compromiso de presentar alegaciones a los presupuestos antes de su aprobación definitiva.
