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El mejor producto como protagonista en Restaurante Pozo del Duque

Se ha convertido en punto de visita obligada en Zahara para degustar el auténtico atún rojo salvaje de almadraba y las mejores carnes de retinto

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Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

Restaurante Pozo del Duque.

  • El Restaurante Pozo del Duque, dirigido por Eduardo Guirola y el chef José Estrella, se inauguró hace casi tres décadas

Con una ubicación privilegiada, en primera línea de la Playa del Carmen de Zahara de los Atunes, el Servicio de Restauración del Hotel Pozo del Duque ofrece tanto a sus huéspedes como al resto de personas que visitan su restaurante, la más rica y variada gastronomía de la costa gaditana.

Pozo del Duque ofrece tanto a sus huéspedes como al resto de personas que visitan su restaurante, la más rica y variada gastronomía de la costa gaditana

Dirigido por Eduardo Guirola y su conocido chef José Estrella, el Restaurante Pozo del Duque se ha convertido en uno de los puntos de visita obligada en Zahara de los Atunes para degustar el auténtico atún rojo salvaje de almadraba (Gadira) y las mejores carnes de retinto certificado de ganaderías ecológicas de la zona. No en vano, son ya casi tres décadas las que cumple este restaurante al servicio de vecinos y foráneos en este paraíso turístico tan cotizado tanto dentro como fuera de España.

Cocina Mediterránea

La cocina del Restaurante Pozo del Duque se basa en los principios de la dieta mediterránea, en la que “el producto es lo principal”. No en vano, “todos los ingredientes que sirven para la elaboración de nuestros platos son de primera calidad y seleccionados minuciosamente entre la enorme oferta de pescados, carnes, hortalizas, verduras y frutas, que tenemos en nuestra tierra”, explica Eduardo Guirola, para quien “lo más importante es que nuestros clientes al consultar la carta sepan exactamente lo que van a comer”. De ahí la sencillez de su carta, en la que se diferencia entre platos fríos y calientes, ensaladas, sopas y revueltos…,  entrantes para picar, pastas y arroces, pescados y mariscos, carnes a la brasa, guisos caseros, atún rojo salvaje de almadraba y postres caseros.

“Cada propuesta se presenta con su nombre principal, el de la materia prima que se ofrece, sin florituras. Las distintas elaboraciones que acompañan a los platos son secundarias a la vez que sorprendentes en sabores”, explica el chef José Estella. Una presentación que choca con la tendencia actual de definir cada plato “en tres líneas” y que se centra en el producto que se ofrece, cuidando mucho la presentación y conservando el sabor y aroma de cada carne o pescado a degustar. Un modo de proceder que tiene su explicación: “Pozo del Duque es un hotel y un restaurante, y nuestros principales comensales son a la vez nuestros huéspedes”. Por eso, lejos de pretender presentarse como un restaurante moderno e innovador, Pozo del Duque se oferta como un restaurante donde “comer bien”, de ambiente tranquilo y familiar, en el que se puede disfrutar en las más de treinta mesas dispuestas tanto en su terraza exterior, como en su terraza de la piscina o en su comedor, de una experiencia culinaria del más alto nivel.

Con una relación calidad-precio “inigualable”, “no hay otro restaurante en Zahara de los Atunes que tenga el nivel de Pozo del Duque”, explica uno de sus comensales asiduos que cada año viaja desde Cáceres a la Zahara para disfrutar de sus vacaciones en el Hotel Pozo del Duque. “El sabor de sus platos son simplemente espectaculares”, comenta otro. “Deseando saber con qué nos sorprenderá hoy el chef”, añaden.

“Sin pretensiones, pero con la garantía de ofrecer lo mejor”, el Restaurante Pozo del Duque les invita a conocer su cocina. 

Sugerencia del chef

El chef le recomienda “cualquiera de las elaboraciones del atún rojo salvaje de almadraba (tataki, tartar, morrillo); nuestras carnes de retinto; nuestro popular pollo de campo en salsa o el crujiente de langostino con miel de caña. Y, por supuesto, los postres caseros”.

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