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El Caja rozó el milagro en la Fonteta (87-84)

Los de Aíto estuvieron a punto de dar la campanada rozando la igualada con un triple en el último suspiro

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  • Partidazo de los de Aíto -

Espectacular. Ayer el Caja fue un alarde de virtudes. Comenzó bastante bien el duelo para los cajistas, que casi siempre fueron por delante en el marcador en los diez primeros minutos de partido, alcanzando ventajas de hasta +5. Landry y Balvin se encargaron de fortalecer la línea anotadora, pero un arreón del conjunto taronja les valió para remontar e irse con ventaja al término del primer cuarto (20-18).

Apretaría Valencia en el segundo cuarto con un Lafayette intratable. Incluso llegó a situarse a ocho de distancia gracias a la capacidad triplista de los locales, pero Bamforth y Satoransky, con la colaboración de Porzingis, tomaron el timón para reduciar distancias, aunque un nuevo triple de Sato dio la ventaja a Valencia antes del tiempo de descanso (46-41).

Se reaunadó el choque con un inspirado Cajasol, que continuó golpeando a un frágil Valencia en defensa hasta remontar (46-49), con espectacular Bamforth. Pero dos triples de Aguilar y otro de Lafayette volvieron a desmontar todos los esquemas cuando los hispalenses comenzan a tener a su rival contra las cuerdas después de un gran periodo (66-63).

Y hasta el final. Hasta la última gota de sudor y más. Hasta ahí llegó el equipo del magistral Aíto García Reneses. Contracorriente, luchando cada balón debajo de aro y corriendo como si fuera la última vez. Hasta cuando todo parecía perdido con el 71-64, Cajasol sacó a relucir toda su casta hasta arrugar a la afición local cuando a falta de un suspiro se situó con un 87-84 y con posesión a falta de cinco segundos. Ese triple forzado y lanzado por Bamforth desde la línea divisoria rozó la gloria, pero el sueño expiró cuando el balón no quiso entrar por el aro. Lo intentó, incluso lo mereció, pero lo que nadie jamás podrá reprocharle al equipo más joven de la ACB es que ayer estuvo a un paso de desmoronar los planes de la que dicen es la mejor liga europea.

Ahora toca pensar en el mañana. En un futuro en el que estos jóvenes talentos darán mucho que hablar.

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